Vitoria-Gasteiz, capital del basket europeo
Este lunes se inicia la temporada de la Euroliga. Y lo hace en mi ciudad, Vitoria-Gasteiz, coincidiendo con los actos conmemorativos del 50º aniversario del Baskonia y la inauguración de su «Ciudad Deportiva Bahk». Un excelente broche de oro para una trayectoria asombrosa de un club con la dimensión y estructura del Baskonia, nada comparable con la de otros monstruos como Real Madrid, CSKA, Maccabi, Panathinaikos, etc.
La Euroliga es para mí, posiblemente, el mejor basket que podemos ver hoy en día en el mundo, superando incluso a muchos insufribles partidos de la NBA. Y eso se nota en la calidad de los equipos, jugadores, etc. No cabe duda que el baloncesto FIBA ha crecido mucho en estos años poniéndose al nivel de la NBA (no hay más que comprobar el «esfuerzo» que han tenido que hacer para volver a «reinar» en el mundo del basket). Y no sólo eso. El proyecto de la Euroliga quiere seguir creciendo más y para ello será en Vitoria-Gasteiz donde se vaya a dilucidar el futuro y el camino a seguir, no exento de polémica. Desde mi punto de vista, el proyecto me parece lógico e interesante. Y más si en él cabe el proyecto del Baskonia, como así parece.
Además del ámbito deportivo, lo que ahora más me «preocupa» es el futuro del Baskonia. 50 años son muchos. Y lo que ha conseguido es digno de mención. Pero, ¿está el proyecto preparado para «sobrevivir» otros tanto años? La ciudad es pequeña, el Buesa Arena ha cubierto su capacidad y parece complicado ampliarlo (aunque se están dando los pasos…)… pero la competencia es enorme. Ya no basta con el «ojo clínico» de Alfredo Salazar, su excelente Director Deportivo, o la «ambición» de Josean Kerejeta. Competir con los grandes supone poner en frente una estructura casi al mismo nivel que los demás. Por presupuesto será complicado, y ha de ser en otros aspectos donde se tenga que seguir estando en vanguardia. No sé si la «Ciudad Deportiva» posibilitará este nuevo salto cualitativo, pero desde luego que el club debe seguir creciento para estar al nivel es absolutamente necesario.
De momento la ilusión parece que permanece intacta. Los aficionados abarrotamos las gradas. Pero el reto que se nos presenta es tremendamente exigente. ¿Será capaz de seguir a la altura? Espero que sí. Por de pronto, nos queda desear toda la suerte para esta temporada y también felicitarnos por esta efeméride. De nuevo Vitoria-Gasteiz está en el punto de referencia del deporte profesional europeo.
